29 de mayo de 2007

Cable a tierra.


Es el día después de que te dejaron.

Algo peor, es el día después de que te cayó finalmente, la ficha de que te venían dejando y volvés a ver la peli, hacés zoom sobre las palabras y los hechos y todo cobra ese inesperado sentido.


El revés de la trama decía “estás nominada”, como con el cassette de Xuxa aquella noche, de pendeja, cuando diste vuelta la cinta para probarle a tus amigas que lo que decían sobre la voz de Satanás era mentira. Sólo que ahora es cierto, aunque tampoco es la voz de Satanás, sino tu propia voz de pelotuda, la que te lo dice.

Sin embargo, no llegaste a tocar fondo, no estás del todo triste. Estás ansiosa, porque ese día siguiente pasa otra cosa aún, importante: tenés la certeza de que el otro todavía piensa en vos. Tiene que estar pensando en vos, te decís, por mil razones que no podrías explicar, porque nadie se olvida tan rápido, porque nadie deja a alguien y listo... al día siguiente ya lo olvidó, insistís. La próxima inevitable pregunta será: ¿cuánto… cuánto tiempo...? ¿24 horas, 48, una semana, quince días, un mes?.

Vos también dejaste a alguien o algo alguna vez, y sabés que el primer impulso posterior a dejar a alguien, es recuperarlo; y que si ese impulso existe, ese mismo puto "día después" lo está teniendo y no va a durar... y tu voz más necesitada, la más débil, te taladra el cerebro diciéndote: hablá ahora! hablá ahora!... "o calla para siempre".

Pero... es el mismo putísimo día en el que lo que alcanzaste a rescatar de alguna sensatez, de alguna prudencia, aún más que de tu malogrado orgullo, te impide marcar ese número, escribir esa carta, obrar en algún sentido. O sea que te vas a callar para siempre. Y el otro lo sabe.
Sabe que no vas a llamar, que puede barajar tranquilo sus dudas o jugar a los dados, y lo sabe porque te vio caer, porque conoce exactamente dónde te dio, exactamente en qué rincón te dejó knock out.
Perdiste. Un amor, sueños, las ganas de soñar, un puto rubio, anda saber que...

9 comentarios:

Matilde dijo...

Me cuesta hablar de esto pero a la vez me sentiría mal si no hablara.
A veces la otra persona está más pendiente de vos (sí, es feo) o piensa más en vos de lo que creés. En cualquier caso, quien se maquina la cabeza decide si hablar o no.
YO aconsejo, por mala experiencia personal, aclarar las cosas sí, pero no forzar encuentros ni amistades ficticias.
Y dejar el celular en la otra pieza. No hay nada peor que mandar un mensaje de madrugada.
Besos Nina.
Lisa

Todo Piola dijo...

Hola lisa! gracias por commentar de este tema tan a nivel personal, muhcas gracias, son la clase de post que me gusta.

Y estoy bastante de acuerdo contigo, es un asco estar pendiente y ponerse nerviosa y esas cosas. Pero no me pasa eos de forzar, amigos ya tengo.

Un beso!

A moonclad reflection dijo...

AUn no entendiste que cada dia sale porque vos senreis...no hay nada de magin en este mundo que no sea brillante si vos no lo miraste antes...hay dias q son malos, hay cosas feas q nos pasan...lo se muy bien..lo sabes mejor que yo aun...pero aun tenes esa magia dulce para que todo cambien...como?...con una sonrisa...con que mires hacia adelante para q veas q no hay nada mas hermoso q lo q vendra..pq ahi estaras vos radiante y hermosa como el primer dia q te miraste al espejo y te diste cuenta q sos tan bonita por el reflejo de tus ojos en el...sos vos lo q lo hace posible si lo queres ver..si no...te lo hare ver con mis palabras si puedo...besos!

Ing. Pablo dijo...

Me gustó mucho este post y como expresaste tus emociones en un tema que es tan delicado.

Ya que en lo personal, nunca pasé por algo así, lo único que te puedo decir es que hace un tiempo se sacó al mercado un celular, que detecta el nivel de alcohol del que lo usa, bloqueando determinados números anteriormente seleccionados. Por algo lo habrán creado...

peyote dijo...

Todo lo perdido, se encuentra en el universo, es un karma sempoiterno.


Saludos nina.

elefante dijo...

que lindo, todos estos sentimientos me pusieron sensible, me encanto
un beso y abrazo
juan

Cinéfila dijo...

cómo hacer para no estar pendiente?
Yo jodía con mis amigas diciéndoles que ahora es más fácil disimular el esperar una llamada, ahora tenemos el celular que va con nosotros a dónde queremos y no tenemos que quedarnos en casa esperando el maldito, maldito, llamado... que nunca llega.

Con el título del post me hiciste acordar de una canción de Fito Paéz (la letra no tiene mucho que ver pero a mi me encanta).
Saludos

Ella dijo...

que seamos objeto de los caprichos y necesidades inmediatas del otro

snif.
ayer vi a mi amado (no el puto rubio) el hétero y morocho...resquebrajamiento de esquemas a full.

hola poli soi nina.

Claire dijo...

Me encantó el artículo.
Describe algo que viví demasiadas veces.
Besos.